El ministro de Fomento en funciones del Gobierno español, José Luis Ábalos, ha sido el encargado de hacer la conclusión de la 30ª edición de la Trobada Empresarial al Pirineu. Ábalos ha invitado a los empresarios a ir en la misma dirección del progreso colectivo afirmado que se tiene que establecer un diálogo para dirigirnos en la misma dirección, porque “todos queremos lo mismo para nuestro país y tenemos que pensar en el que nos une y no tanto en el que separa”. Para el ministro en funciones, no se trata sólo de que los empresarios definan su agenda empresarial, se trata que “unos y otros (en referencia a políticos y empresarios) nos escuchamos y nos pongamos en el lugar del otro, para debatir y llegar a acuerdos, puesto que el futuro de Cataluña, España y Europa nos importa a todos”.
José Luis Ábalos cree que “Cataluña tiene que ser un estímulo para el tejido empresarial español” y que “el gobierno catalán tiene que preguntarse si ha sido una solución para la economía catalana o un problema” puesto que, en palabras suyas, “el procés no ha beneficiado a la economía catalana ni a su sociedad”.
El representante del gobierno español ha dado respuesta a las inquietudes que le ha planteado Voltes en nombre de los empresarios leridanos de mejorar las infraestructuras catalanas, como el puerto o Rodalies de Catalunya.
En el acto de conclusión, el presidente de la Trobada Empresarial al Pirineu, Vicenç Voltes, ha hecho referencia a la importancia de las infraestructuras para mejorar la competitividad, porque “el corredor mediterráneo estará operativo en el 2021 y a Lleida le resulta imprescindible estar conectada con este corredor”. Según Voltes, Lleida ha hecho un gran esfuerzo en la exportación, pero “necesita una mejora de las infraestructuras para estar mejor conectada con Francia y con su puerto natural”.
Antes, sin embargo, el responsable del Gobierno de Andorra, Xavier Espot, ha participado en el acto de conclusión y ha asegurado que “Andorra siempre está presente a este encuentro gracias a los patrocinadores y empresarios andorranos que participan” y que “el Principado no es un país cerrado, sino un lugar también de encuentro”.