La tabla ‘Perspectivas económicas: ¿frenado o aceleración del crecimiento?‘ fue introducida por Jaume Puy, rector de la Universidad de Lleida, que abrió el debate haciendo un reclamo a la adaptación de la actividad empresarial con la necesidad imperante de encontrar un modelo más sostenible. “Tenemos que cambiar la forma de producir y consumir antes de que sea tarde, también en el mundo agrario” afirmó a la vez que reclamó liderazgo en este proceso.
En su turno Oriol Amat, Catedrático de economía financiera de la UPF y vicepresidente de la Red Vives de Universidades, remarcó la dificultad de hacer estas perspectivas teniendo en cuenta que la economía es una ciencia social. “Cuando hay 3 economistas hay 4 opiniones“, afirmó en tono bromista.
Cambios, incertidumbres y perspectivas: convertir las amenazas en oportunidades
Pese a la dificultad, Amat afirmó que vivimos tiempos de cambio, un cambio que ilustró con la evolución de las portadas de la revista Time. Hace 85 años el hombre del año, según la revista, fue el CEO de General Motors, empresa que, actualmente, con muchos menos trabajadores hace muchos más coches. Por tanto, ha aumentado la productividad, pero, aun así, Estados Unidos tiene un índice de paro similar al de 1955. Esto hace que Amat defienda que las revoluciones industriales destruyen puestos de trabajo, pero crean muchos más.
Continuamos con las portadas, puesto que en 2010 la persona del año (que no el hombre, muestra de otro cambio) era Mark Zuckerberg. Esto indica que hemos pasado de una economía basada en la maquinaria a una economía basada en los intangibles, tanto que Facebook vale actualmente diez veces más que General Motors. En 2019 la portada del magacín estaba dedicada a la sostenibilidad. Con Greta Thunberg de protagonista, ilustraban un tercer cambio: la economía basada en la sostenibilidad. Amat también ha señalado un cuarto cambio, una mayor diversidad. “Las portadas del Time nos enseñan cómo el cambio ha estado siempre, la diferencia es la aceleración de estos cambios en la actualidad”, ha asegurado el catedrático que también se ha referido a la incertidumbre como una característica recurrente: “Ha habido muchos momentos en los que había más incertidumbre que en la actualidad, como en el 2020”.
En cuanto a las perspectivas económicas, Amat se ha mostrado optimista afirmando que “lo que va a pasar dependerá de lo que hagamos a partir de hoy“. Las previsiones dependen de la acción propia, pero evidentemente existen algunos condicionantes como la inflación, la cadena de suministros, la geopolítica, etc. También ha señalado algunos condicionantes relacionados con el tejido productivo que no se están trabajando bien. Por ejemplo, echa de menos más implantación de la cultura del esfuerzo así como mejorar en I+D: “Los países de nuestro entorno nos están avanzando. Solo desde la innovación podemos ganar competitividad”. Además, reclamó un papel más activo de las administraciones al ser proactivos y generar nuevas oportunidades como actores y no como fiscalizadores. En concreto, cree que es necesario aprovechar las oportunidades como los fondos europeos Next Generation, de los que en España sólo se han ejecutado el 20% de las previsiones.
En definitiva, Amat cree que existen riesgos importantes como las crisis sociales o medioambientales, que con la habilidad suficiente pueden convertirse en oportunidades aportando valor añadido a la producción en este sentido. También se ha mostrado optimista por las previsiones de crecimiento de 2023 y 2024 y defiende que con la habilidad suficiente podemos convertir la crisis en oportunidad. Defendiendo, sobre todo, que esto acabe revirtiendo en mayor bienestar.
Ambición apalancada
Por su parte Daniel Lacalle, doctor en economía y gestor de inversiones, mostró una mirada más crítica sobre el presente y el futuro de las perspectivas económicas reclamando que “cuando hablamos de economía siempre hablemos de resultados y nunca de inversión” . En esta línea, cree que en economía global se anuncian y aplican planes de inversión como los fondos Next Generation y no se estudia posteriormente si han tenido el efecto multiplicador esperado. “Es increíble creer que la eurozona esté a punto de entrar en recesión con el impulso económico del plan Next Generation y que en tres meses se creara más dinero que en toda historia del euro”. Unos programas que también ha criticado porque, actualmente, tienen un retorno negativo (es decir, no aportan más de lo que se invirtió). Datos en los que Lacalle reclama poner el foco para captar mejor la perspectiva y su contexto, “si no podemos caer en un exceso de euforia o de pesimismo”.
También se refirió a las previsiones de crecimiento mundial que, según la OCDE, son de un 2,5%. Con algunos datos muy importantes relacionados como que India ha sobrepasado a China como país de mayor crecimiento del mundo o que América Latina se enfrenta a una nueva década perdida por problemas fiscales y monetarios. Por su parte Estados Unidos crece con más pobreza después de cada crisis, pero mantiene pleno empleo y la moneda de referencia mundial por la importancia de la reserva federal en el contexto global.
Además está en marcha una revolución tecnológica que crea empleo, riqueza y valor añadido, una batalla sobre todo entre EE.UU. y China en la que la UE no ha comparecido. En este sentido, Lacalle se ha mostrado muy crítico con las acciones emprendidas por los distintos liderazgos financieros de la Unión. Ni el plan expansivo de 2009, ni el actual han convertido las amenazas en oportunidades. Ante esto, defiende las subidas de los tipos de interés para controlar la inflación, pero alerta de que se necesitan más pasos como la reducción de dinero en circulación y la reducción del gasto público.
Por último, ha criticado el apalancamiento de la política monetaria y fiscal de la UE. “Nos hemos conformado con vivir con déficit y con endeudamiento”, por eso ha pedido abrir más la mirada al mundo y no mirar tanto hacia dentro “nos conformamos con datos que no responden a la inversión hecha. Tras el mayor estímulo todavía estamos a niveles de 2019, en los que estábamos cerca de entrar en recesión, hay que ser más ambiciosos”.
Fotos: Genaro Massot