‘Talento y valentía en clave leridana‘ es el título de la mesa de debate que protagonizaron, en el marco de la 34 Trobada Empresarial al Pirineu, cuatro empresarios del territorio que presentaron sus proyectos de negocio. El debate fue moderado por la periodista y politóloga Magda Gregori. El presidente de la Diputación de Lleida, Joan Talarn, fue el encargado de la presentación de la mesa, durante la cual destacó la capacidad creativa de las empresas y definió el territorio como tierra de oportunidades. También se refirió al tejido empresarial como “un ejemplo de valentía para sacar adelante un proyecto, que significa sacar adelante a todo un país”.
La Boscana, el territorio en el plato
El chef Joel Castanyé fue el primero en explicar a los asistentes su proyecto. Propietario del restaurante La Boscana de Bellvís, con una estrella Michelin y tres solos Repsol, Castanyé fue nombrado chef revelación del 2018 por la Academia Catalana de Gastronomía y Nutrición y destaca por la conceptualización del territorio a través de sus propuestas culinarias.
Durante su intervención, el chef explicó su trayectoria desde sus inicios, pero es a partir del año 2020 cuando comienza el proyecto Fruta de Lleida, que representa un punto de inflexión en su negocio. El proyecto pone el énfasis en la gastronomía frutal como motor de desarrollo sostenible del territorio. Primero, con un menú de degustación como la máxima expresión del paisaje con la fruta como hilo conductor; en 2021, la prioridad fue llevar la fruta al mundo salado y ya en 2022, se puede afirmar que más del 70% de las elaboraciones de su menú contienen fruta como ingrediente principal.
El proyecto de este 2023 pasa por crear una auditoría creativa de elaboraciones frutales para continuar investigando todas las aplicaciones gastronómicas de la fruta como “nunca nadie lo ha hecho”. De hecho, en La Boscana ya se pueden degustar embutidos y escabeches de frutas. El futuro de este nuevo concepto gastronómico será crear un espacio I+D, un espacio culinario sostenible y un ecosistema creativo. Para Castanyer, su empresa “es un proyecto de vida que pasa por la pasión, por un hobby, por la familia, y esto es parte del éxito“.
Roc Roi, de Llavorsí al mundo
Lluís Rabaneda, CEO de Roc Roi, empresa de actividades de aventura de prestigio internacional en el territorio y en el paisaje, explicó cómo un pequeño negocio iniciado en Llavorsí ha crecido hasta llegar a organizar campeonatos deportivos con presencia de más de 40 países y en asesorar iniciativas en todo el mundo, como la práctica de kayak ante el Perito Moreno de Argentina. Rabaneda recordó que los deportes de aventura en Lleida empezaron a aparecer en los años 80 del siglo pasado en el Noguera Pallaresa, principalmente con clientes franceses y hoy en día son una parte importante del tejido empresarial del territorio.
El responsable de Roc Roi no obvió la dificultad que supone emprender en una zona como el Pallars, “quizás la zona más desconocida del Pirineo”, donde cada vez hay menos población, existe una gran distancia respecto a núcleos grandes, y allí existe una dificultad logística clara de mercancías y pasajeros. Rabaneda concluyó que la suya es una empresa que ha ido creciendo poco a poco, “con el objetivo de desestacionalizar la actividad y no depender de terceros“. Actualmente, disponen de tres centros de trabajo, son líderes del sur de Europa en el sector de distribución del kayak y ofrecen servicios de consultoría en todo el mundo.
Este empresario cree que “la convicción de empujar el proyecto, a pesar de las dificultades, es lo que nos ha hecho que llegar a donde estamos hoy, hemos creado de cero una empresa con los conocimientos que hemos obtenido en el Pirineo“.
Laumont, especialistas en trufas y setas
Jordi Serentill, CEO y fundador de Laumont, explicó su experiencia como mayorista de trufas y setas seleccionadas que exporta a más de 35 países desde sus plantas de Tàrrega y Valladolid. Laumont, con una trayectoria de cuarenta años, es hoy una empresa consolidada y con reconocimiento de marca. Serentill destacó que una de las claves de este éxito es que “cada década se han hecho cosas completamente distintas de la anterior“. De hecho, en los últimos diez años, la facturación ha pasado de 10 a 35 millones de euros.
La innovación es un pilar fundamental en Laumont. Así, Serentill afirmó que “es un negocio en evolución constante. Tanto si la iniciativa fracasa como si es un éxito, el aprendizaje es clave para el futuro”. Durante su intervención, también explicó que la experiencia les ha demostrado que “los grandes cambios vienen por decisiones que se toman el día a día”. Sobre las ventajas de estar en Lleida, Serentill destacó “las grandes sinergias con la industria hortofrutícola en empresas de servicios y transportes”. Y concluyó que “el éxito en nuestra casa son las personas, es lo que te hace crecer”.
Roca, harinas ecológicas del Urgell
Lot Roca, gerente de la empresa familiar Farinera Roca (Agramunt), es un ejemplo de cómo puede evolucionar un negocio tradicional gracias a la formación, la apertura de miras y la evolución del mercado. Esta empresaria y su hermana tomaron el relevo del abuelo con una harinera fundada en 1932, con un personal envejecido, maquinaria obsoleta y en un sector dominado por los grandes grupos.
Especializados en hacer harina por churros, “apostamos por empezar a trabajar con nuevos trigos (kamut, espelta…), aprender las nuevas tendencias relacionadas con demasiadas madres, elaboraciones sin aditivos, largas fermentaciones…”, de modo que pasaron a ofrecer una amplia variedad de productos, con cereales, combinaciones y fuerzas distintas. Asimismo, Roc ha explicado cómo la idea del “Forner casolà” (ventas on line), con mucha presencia en las redes les ha dado mucha visibilidad. De cara al futuro, la harinera urgelense trabaja para mejorar la trazabilidad de la producción y para la informatización, “para poder trabajar en el siglo XXI“.
Fotos: Genaro Massot