Durante la primera jornada se abordaron las “Experiencias empresariales de éxito con clave leridana“, a través de la mirada de cuatro empresarios que han conseguido un modelo de negocio de referencia y que son ejemplo de innovación y sostenibilidad. Junto con estos dos conceptos, los cuatro directivos han coincidido en la importancia de los equipos humanos, la resiliencia y el poder convertir una amenaza o debilidad en un reto para crecer. La mesa ha sido presidida por Joan Talarn, presidente de la Diputación de Lleida, quien la ha considerado como “una de las mesas más interesantes de la jornada”, y ejemplo de las “principales virtudes que tiene la Trobada para conocer las perspectivas y cómo abordan los retos que se encuentran, a la vez que manifiesta las buenas prácticas empresariales que ayudan a retener el talento y captar de nuevo”.
Virgínia Agelet, COO y cofundadora de Ilerna Online, ha ofrecido un viaje para conocer los orígenes de la compañía, que nació como una prueba piloto de FP, con 38 alumnos, y que hoy en día se acerca a los 35.000 alumnos con 498 trabajadores. Agelet explicó que el modelo de negocio del grupo se basa en una máxima: “si no es bueno para los alumnos, no es bueno para nosotros”. Por su parte, Sònia Plana, CEO de Exquisitarium, ha explicado los inicios de la empresa, que empezó en un local de alquiler de Bellcaire d’Urgell, en un momento en el cual no estaba reconocida la necesidad de productos frescos congelados para la restauración. “La clave es ofrecer un producto de valor añadido, y, por eso, la primera gran decisión fue apostar por la diferenciación, con platos elaborados, en vez de hacerlo por los platos tradicionales”, remarcó Plana.
La tercera intervención ha sido a cargo de Josep Ribalta, CEO del Grup Pinsos Ursa, compañía que nació en 1977 con la creación de una cooperativa por parte de varios ganaderos del Pirineo. “Actualmente, la producción de pienso es de 160 mil toneladas y exportamos 198 mil animales a 16 países, pero el elemento fundamental es que esto no va de personas, sino de equipo: sin un buen equipo no se puede crecer y tener una visión de internacionalización”. Finalmente, Delfí Robinat, CEO de Casa Delfín y socio fundador de Culinarium, ha finalizado la mesa redonda explicando cómo la empresa familiar pasó de una tienda en Tàrrega en 1863 a un grupo con dos líneas de trabajo: Casa Delfín, orientada para equipamientos para la hostelería, y Culinarium, cadena de tiendas para el cliente final con presencia en toda Cataluña y, actualmente, en expansión al ámbito estatal. Con una experiencia de más de 150 años, Robinat subrayó que el grupo ha pasado por varias crisis, “pero siempre nos hemos levantado”.
Los cuatro reconocieron que, si volvieran a empezar, no dudarían en apostar de nuevo por Lleida para iniciar sus proyectos empresariales, destacando sobre todo la calidad de vida y las oportunidades que el territorio ofrece.